Para preparar un café, hay que tener en cuenta antes el punto de molturación, fundamental para conseguir una extracción correcta. Este variará en función de la cafetera escogida.
Si el café está molido demasiado grueso, el agua atravesará demasiado rápidamente y dará una bebida aguada y sin cuerpo.
Si el café está demasiado fino, la extracción será demasiado lenta y dará una bebida muy concentrada, amarga y astringente.
La calidad del agua es también muy importante: Debe ser de mineralización débil y libre de excesivo cloro. También hay que renovarla del depósito en el caso de las cafeteras exprés, cuando lleve más de 3 días en el mismo.
Cafetera de émbolo
Necesitaremos un punto de molturación grueso y entre 8 y 10 gramos de café por taza de 150 ml. Es totalmente manual. La preparación es sencilla y conseguiremos un café sabroso, de buen cuerpo y con un fino sedimento.
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Pre-calentar la cafetera y la taza a utilizar con agua caliente.
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Añadir la cantidad de café deseada.
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Echar el agua correspondiente de manera enérgica y con movimentos circulares para que se empape todo homogéneamente y a temperatura de casi ebullición. No es necesario llenar hasta arriba ya que si el café es muy fresco o está recién molido, puede aumentar su volumen.
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Dejar reposar unos segundos el café y a continuación removerlo bien con una cucharilla. Colocar la tapa con el filtro en la máquina sin tocar el agua, para mantener la temperatura.
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Después de unos 3-4 minutos, sacar la tapa y remover lentamente. Colocar de nuevo y presionar suavemente para desplazar el café molido hacia la base de la cafetera. Si notas que el café no ofrece demasiada resistencia querrá decir que estava molido demasiado grueso. Si te ocurre lo contrario, querrá decir que estava demasiado fino, y hay que tener cuidado pués al presionar el café se podría escapar por los laterales del filtro.
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El café está preparado. Servir immediatamente sin dejar en la cafetera para evitar que aparezcan notas desagradables al sabor.
Cafetera italiana
También llamada Oroley o Moka. Requiere un punto de molturación intermedoi. Usa la pressión del agua hirviendo dando una bevida de alta concentración.
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Es importante poner el agua ya pre-calendada en la máquina por que si se pone directamente fría, toda la màquina se calentará demasiado y dará un sabor más amargo y con menos cuerpo y podría dar notas metálicas y astringentes.
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Llenar con esta agua caliente la parte inferior justo hasta debajo de la válvula.
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Colocar el filtro en el interior de la base y llenarlo de café presionado ligeramente dejándolo a ras.
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Enroscar fuertemente las dos partes de la cafetera sin inclinarlas, tomando la base con un paño para evitar quemarte.
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Poner la cafetera con el fuego intermedio con la tapa abierta.
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Estar pendiente de la salida del café por la parte superior. Cuando esto ocurra poner el fuego al mínimo. Primero saldrá de manera intermitente para convertirse en un flujo constante de color miel, momento en el que debemos retirarlo del fuego cerrando la tapa.
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El café está listo.
Cafetera de filtro eléctrica
También conocida como Melitta. El punto de molturación debe ser medio, tirando a fino. Da un café poco concentrado y de cuerpo medio, también llamado americano.
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Colocar el filtro de papel en su lugar correspondiente y empaparlo con agua caliente.
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Una vez eliminada toda el agua del filtro, añadir entre 8 y 10 gramos de café por taza de 150 ml.
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Llenar el depósito con el agua equivalente al café utilizado.
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Encender la máquina. Cuando el agua llegue a la temperatura adecuada caerá sobre el café molido. Esperar a que es vacíe todo el depósito y ya estará listo para servir.
Cafetera de filtro manual
Necesita una molturación media. La cantidad de café será de unos 20 gramos por 230 ml de agua. La diferencia entre este sistema y el eléctrico, es que somos nosotros quienes controlamos el flujo de agua sobre el café, lo que nos ayudará a conseguir una mejor extracción y un mejor cuerpo.
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Colocar el filtro de papel en su lugar correspondiente y empaparlo con agua caliente.
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Una vez eliminada toda el agua del filtro, añadir el café molido.
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Lentamente, ir tirando el agua a unos 95º en el centro del café y después circularmente por el resto, de manera que todo el café se empape sin llegar a filtrarse en la taza. Este ganará volumen, presentando más resistencia cuando le añadimos el resto del agua.
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Dejar reposar durante medio minuto y luego volver a echar agua caliente sobre el café de manera lenta y con movimentos circulares, asegurándonos de no tirar directamente en los laterales del filtro, proceso que debería durar aproximadamente un minuto. Recomendamos utilizar una jarra con cuello de cisne per tener un buen control.
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Una vez alcanzados los 230 ml de café, retirar el filtro y ya tenemo el café preparado.
Cafetera aeropress
Requiere una molturación fina y unos 10 gramos por cada 150 ml. El resultado será similar al de la cafetera de émbolo pero con menos sedimentos y más cuerpo, ya que en este caso el café pasa por un filtro de papel al final del proceso.
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Colocar el filtro de papel en el disco de plástico perforado y apoyarlo sobre la taza de café. Remojarlo con agua caliente de manera que pre-calentaremos la taza. Vaciar la misma.
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Mojar el tubo e introducirlo con la parte de caucho negra dentro del cilindro de elaboración del café, de manera que el caucho casi toque la parte inferior del círculo del número 4 y apoyarlo sobre una encimera de manera que los números se vean al revés.
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Con el embudo que lleva la cafetera, añadir el café molido dentro del cilindro. Retirar el embudo y echar agua de manera enérgica a 95º hasta llegar al círculo del número 2. Remover para que todo el café se empape homogéneamente y a continuación seguir echando agua hasta llegar a un dedo de la parte superior.
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Dejar reposar durante un minuto y enroscar furtemente el disco con el filtro.
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Darle la vuelta y apoyarla sobre la taza de café. Una vez bien estabilizada, con las dos manos presionar lentamente el tubo superior hacia abajo para comenzar la extracción de café. Detenerse cuando toda el agua haya caído en la taza.
Cafetera de sifón
También llamada Kona. Necesita un punto de molturación intermedio y es aconsejable un tostado corto o light para extraer las mejores cualidades del café con este sistema. Conseguiremos un café ligero pero conservaremos todas sus notas afrutadas y florales potenciadas de manera espectacular. La cantidad debe ser de unos 20 gramos de cafè per cada 200 ml. de agua.
Consiste en dos esferas de vidrio colocadas una sobre la otra. La de encima es donde va el café molido, está abierta por su parte superior y tiene un tubo de vidrio en la parte baja que la conectará con la de debajo. Esta tiene un agujero en la parte alta y se apoya en un soporte que le sirve de base, bajo el que se deberá aplicar una fuente de calor, ya sea un quemador de alcohol o una vitrocerámica. El agua de la esfera inferior hervirá, generando una presión que la hará subir a la superior donde se infusionará durant unos minutos con el café molido. Una vez retirada la fuente de calor, el agua volverá a la esfera inferior arrastrando la infusión pero no el café, que quedará retenido en el filtro ubicado en la parte superior del tubo.
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Colocar el filtro en la entrada del tubo de la esfera superior, tirando de la cadena para asegurar su correcta colocación.
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Con el agua calendada previamente cerca del punto de ebullición, llenar la esfera inferior y aplicar la fuente de calor.
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En cuanto ésta empiece a hervir, colocar el tubo de la esfera superior en la inferior y esperar a que suba.
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Regular la temperatura a la baja intentando hacer burbujas muy finas y lentamente colocar el café molido a la esfera superior asegurándonos que este se empapa plenamente removiendolo con una espátula.
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Mantener la llama durante medio minuto más y seguir removiendo en sentido contrario.
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Retirar el fuego un minuto después de haber mezclado el café con el agua y dejar que este baje hacia la esfera inferior. Una vez allí ya está preparado para servir (en este caso en copa de vidrio es lo más aconsejable).
Cafetera exprés doméstica
El punto de molturación debe ser fino (sin llegar nunca a ser harinoso). Dará un café tipo expreso: En una extracción de unos 25 segundos, una bebida de unos 35 ml. con una crema de color avellana de entre 2 y 3 milímetros de espesor.
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Encender la máquina y sacar el portafiltros o brazo del grupo, limpiando los restos de extracciones anteriores.
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Rellenar con unos 8-9 gramos de café por taza.
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Presionar ligeramente el café con el prensador que lleva la cafetera. Dependiendo de la fuerza empleada, el café saldrá más o menos concentrado.
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Antes de recolocar el brazo al grupo, dejar pasar un poco de agua para terminar de calentar esta parte de la máquina y de paso limpiar restos que hayan podido quedar de cafés anteriores.
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Ya podemo darle marcha y hacer el café. La caida debe ser fluida y constante y con forma de cola de ratón. Es importante que ésta no supere los 30 segundos, momento a partir del cual el café nos aportará astringencias negativas por el sabor.
Cafetera exprés monodosis
La monodosis ya viene preparada con el punto de molturación ideal para un expresso. Contiene entre 7 y 8 gramos de café envuelto y perfectamente prensado en papel de filtro y dará el mismo resultado que la cafetera exprés de cafè molido. Su principal ventaja es que al ir cada café envasado de manera individual y en atmósfera controlada, este se mantiene perfectamente fresco durante meses hasta el momento de la extracción y que es mucho más limpio que cualquiera de los otros sistemas ya que prácticamente no requiere limpieza después de hacer el café.
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Encender la máquina y esperar que alcance la temperatura indicada.
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Cerrar el grupo sin monodosis y hacer pasar agua durante unos segons para terminar de calentarlo correctamente (sólo para el primer café, luego si no paramos la cafetera ya no será necessario).
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Abrir el grupo, abrir el sobre que contiene la monodosis, colocarla en el grupo, cerrar y hacer el café.
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Al terminar, extraer la monodosis para evitar que al secarse se quede adherida a la cazoleta del grupo (si esto ocurre, basta con hacer pasar agua para humedecerla y poderla retirar fácilmente).
ATENCIÓN: No hay que confundir este sistema con los de cápsulas, ya que éstas sólo contienen entre 5 y 5’5 gramos de café, que sometido a una altísima presión cogerá la apariencia de un expreso sin llegar a serlo ni en cuerpo ni en sabor.